Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

25 oct 2014

MIS GAFITAS, MODELO OTOÑO

No cabe la menor duda de que estamos en pleno otoño... Incluso ha llegado hasta mis gafitas.
Quiero seguir mirando el mundo, y a vosotros, a través de ellas. Ahora, esa visión se me complica un poco por la escasa transparencia de estas hermosas hojas... que Dios me ha dado. Pero las cosas -y las hojas- hay que aceptarlas como llegan.
Ellas, y yo, os saludamos y esperamos seguir viéndoos por esta nube otoñal. Gracias por el interés que demostráis, día a día, visitándonos y por vuestros amables comentarios.

 Ángel C. T.

6 comentarios:

  1. Vaya, se te han llenado de hojas los ojos... Menos mal que no nos impiden ver tus aportaciones a nuestros mejores ratos.

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    1. Así es, Francisco... Y yo espero que el otoño sea compasivo y no las haga caer dejando a mis gafitas al descubierto... No son tiempos como para ir ligeritos de hojas... Gracias.

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  2. Fátima Reyes García25 de octubre de 2014, 22:53

    Y aquí seguiremos contra viento,hojas y marea...

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    1. Y entonces, mis gafitas seguirán sintiéndose muy felices por vuestra presencia y compañía..
      Gracias Fátima.

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  3. Hoy si llegó el otoño de verdad; pero por más que llueva, truene, diluvie, nieve, haga frío, seguiremos aquí, aportando a tus gafitas el calor de nuestra presencia.

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    1. Espero y deseo que así sea, Manolo. Muchas gracias por ello.

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