Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

31 oct 2014

LA FAMILIA

-Hola.
-Hola.
-¿Cómo está tu cuñado?
- Bien, gracias ¿Y tu sobrino?
-Ahí va, mejorándose…
-Pues mi hermano me comentó lo de tus abuelos
-Ah, mira...
-Es que mi tía, cuando estuvo en tu pueblo, al parecer se encontró con tu hija y su prima y les estuvo preguntando por ellos.
-¿Por quiénes?
-Por tus abuelos, ¿por quiénes iba a ser?
-Ah, pensé que te referías a cuando mi suegra estuvo charlando en el supermercado de tu yerno y después tu prima les acercó a la casa de mi mujer que, al parecer, como conocían a la nieta de tu cuñada, pues había salido el tema de mis abuelos.
-Claro, ya me imaginaba algo de eso…Sin embargo, ya sabes que cuando coincidimos algún fin de semana por allí, tus tíos siempre son tan amables con nosotros que, hasta mi madre me ha dicho que los tiene como a su propia familia, porque le recuerdan a sus hermanos.
-Anda, qué bien. Pues seríamos una familia muy numerosa.
-Y tanto… ¡Más que ´”La gran familia”!
-Oye, por cierto, ya que no sé cuando volveré a verte, quiero aprovechar la oportunidad para invitaros a la boda de mi hermana que se casa por fin.
-¿Y con quién se casa?
-Pues con el sobrino de la mujer de tu primo segundo.
-¿Qué me dices? Y nosotros sin enterarnos…  ¿Y a quiénes quiere invitar?
-¡A todos!
-¿A todos?
-Sí. A todos.
-Madre mía… ¡Vamos a ser ciento y la madre!
-Ciento, la madre, el padre, los abuelos, los tíos….
-Pues da recuerdos a todos ellos, de mi parte. Hasta otro ratito.
-Lo intentaré… ¡Lo mismo digo! Chao.

Ángeles Córdoba Tordesillas ©


8 comentarios:

  1. ¡Jajajajaja...! Por favor, qué lío de familia. Me he perdido... pero me ha recordado algo típico de los pueblos pequeños como el de la Montaña Palentina donde viví. En lugares así, la endogamia es muy frecuente y conversaciones como la tuya muy frecuentes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues eso mismo pienso yo, francisco. Puede parecer una situación chocante pero creo que es bastante habitual en zonas rurales. Me alegro de que te hayas divertido con su lectura. Gracias por comentarlo. Por cierto, da recuerdos a tu familia, de mi parte.

      Eliminar
  2. Fátima Reyes García2 de noviembre de 2014, 21:20

    Rural y no tanto...esas cosas se dan,pero con qué arte las cuentas!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En Andalucía creo que incluso se dan más, amiga, o esa idea tengo. Gente abierta y con buena disposición para hacer una piña de la familia. Gracias por ese arte que me adjudicas. Un abrazo.

      Eliminar
  3. Como siempre me he divertido leyéndote....y tiene que ser también divertido tener una gran familia así...¡¡¡y todos tan agustitoooo!! jajaj
    Un besote!!.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muy divertido... Vamos, no imagino nada más chistoso. Si hubiera por aquí uno de esos iconos que hacen un giño, lo pegaría...
      Un beso Aratnza y gracias.

      Eliminar
  4. Esas graciosísimas conversaciones de entresijos familiares, las he oido yo a mis propios parientes, y realmente yo no me enteraba absolutamente de nada, me perdía pronto. Pero aquellos que mantenían la conversación, sabían perfectamente quien era el sobrino del cuñado del primo el del pueblo que se casó con la prima segunda del tío de la Eustaquia. Besos Ángel, me divertí muchísimo, como siempre me encanta la frescura del relato y el lenguaje.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra mucho que te haya divertido este diálogo tan confuso como familiar...
      Gracias por tus halagos, Manolo.
      Por cierto, la prima de la cuñada del yerno de mi tía abuela, me ha pedido que te salude de parte del sobrino de su hermano... No sé si sabrás a quién me refiero... Yo no. Un abrazo.

      Eliminar