Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

21 jul 2015

EL MUNDO AL REVÉS

Callan los niños.
Ríe el Sauce llorón.
Nadan los pájaros.
Vuelan los peces.
Yo te olvido.
Tú…

Ángel C. T. ©

Fotografía hecha con estas gafitas que Dios me ha dado.

8 comentarios:

  1. Y sueñan los sueños. Precioso tu cielo en el que, allí en lontananza, vislumbro tu nube siempre acogedora.

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  2. Hermoso poema... Sí, a veces, el mundo al revés nos reconforta... Como escribió Goytisolo:

    "Érase una vez
    un lobito bueno
    al que maltrataban
    todos los corderos.
    Y había también
    un príncipe malo,
    una bruja hermosa
    y un pirata honrado.
    Todas estas cosas
    había una vez,
    cuando yo soñaba
    un mundo al revés."

    Beso enorme.

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    1. Y me lo decía mi abuelito, me lo decía mi papá,
      me lo dijeron muchas veces, y lo olvidaba muchas más.
      También de J. A. Goytisolo.
      Otro beso enorme para ti, Javier, y gracias.

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  3. Respuestas
    1. Eso. Que se quede, que se quede.
      Gracias, Arantza, por terminarlo de esa manera tan magistral.

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  4. Por cierto, me habéis recordado a Paco Ibáñez, maravilloso poniendo música a tantos poetas.

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