Desde mi nube y con gafitas

“Érase una vez un Ángel que del Cielo quiso bajar a la Tierra para experimentar lo que era ser humano. Adoptó la forma de mujer. Sólo bajó con lo puesto… unas preciosas gafitas que Dios le había regalado y una nube pequeña, desde donde miraba cada día todo lo que sucedía entre el Cielo y la Tierra. Sólo a través de esas gafitas podía ver nítidamente el mundo y a las personas que vivían en él. Sin ellas se sentía desorientada, perdida, pues todo se volvía invisible e incluso ella misma, ya que ni siquiera podía percibir su propio cuerpo. Esta historia está contada por ese ángel que, a través de la narración de sus peculiares observaciones, intenta representar el mundo que ve.”

Un día agarré mi media nube y mis gafitas (esas que Dios me ha dado) y fui a vivir a un lugar indeterminado entre la metáfora y el surrealismo. Desde entonces, estoy pagando la hipoteca con poemas, cuentos, relatos, novelas, dibujos, pinturas, fotografías… ¡canela fina! y otras especias.

Poco a poco o mucho a mucho, dependiendo del día, estado de ánimo y condiciones atmosféricas, suministraré género del bueno, fabricado a mano, con amor, humor y pasión.

Porque te quiero. Porque todo lo que hago es pensando en ti y con el corazón… de la única forma que sé vivir. Y estoy en ello, dispuesta a seguir haciéndolo con muchas ganas, para que tú lo puedas disfrutar. Ojalá sea así.

19 nov 2015

CONFIADO CORAZÓN

Ay, confiado,
confiado, corazón,
que llevas toda la vida
en la escuela del amor...
y aún no has aprendido
ni la primera lección.

Ángeles Córdoba Tordesillas ©


Las Hijas del Sol-Ay, corazón

6 comentarios:

  1. La primera condición del Amor es la Confianza, y como ya está aprendida, a esperar con paciencia la segunda que es la Perseverancia.
    Mucha suerte y que llegue pronto.

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    1. La confianza siempre está pero cuando algo no fluye por mucho que se persevere... Creo que es mejor dejar las cosas fluir, como decía aquél:
      Be water, my friend... o algo así.
      Gracias por tus experimentados consejos, Javier.

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  2. En las cosas del corazón es ( casi ) imposible aprender la lección. Y la verdad,
    que algunas veces tendría que aprenderla .¿Pero quién cambia a un corazón...?.

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    1. A veces lo cambia otro.
      Sufre o disfruta modificaciones por efecto del amor.
      Gracias por andar por aquí, con ese corazón sabio, Joaqui, que no te lo cambie nada ni nadie.

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  3. La verdad es que tendriamos que escucharle a cada momento. Pues es lo mas valioso que tenemos.Besos

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